Cómo trasplantar violetas africanas en 6 sencillos pasos
Gracias a sus hermosos y vivos colores, la violeta africana es una de las plantas de interior más popular para los jardineros novatos y más experimentados.
Pero las violetas africanas también son extremadamente sensibles y no demasiada gente sabe cómo cuidarlas adecuadamente, cosas aparentemente simples, como cómo trasplantar las violetas africanas, son increíblemente importantes para mantener tu planta cuidada y saludable.
A diferencia de otras plantas de interior, las violetas africanas deben trasplantarse al menos una vez al año. Si no se trasplanta con éxito, o no se trasplanta en absoluto, es probable que las violeta africana pierda sus hojas, se pudra en el tallo y se marchite.
Pero cuando se las cuida adecuadamente, las violetas africanas pueden llegar a tener un tronco parecido a una palma, y las filas inferiores de hojas desaparecen. De hecho, un buen indicador de tener una violeta africana saludable es si las filas más bajas de hojas han crecido desde el tronco de la planta hasta unos centímetros por encima del borde de la maceta. En este punto, es hora de deshacerse del cuello, algo que generalmente se hace cada seis meses.
De lo contrario, el trasplante debe realizarse una vez al año o cuando la planta supere su maceta actual, lo que hará que las raíces crezcan alrededor del cepellón. Si esto sucede, tu violeta africana está enraizada.
El proceso de trasplante se puede realizar moviendo la planta a una maceta más grande o si el cuello es visible, pero la planta no tiene raíces, en un suelo más fresco.
Ahora, repasemos seis sencillos pasos para trasplantar tu violeta africana.
1. Saca tu violeta africana de su maceta actual
Para soltar la planta de la maceta, golpae suavemente los lados de la maceta contra una superficie dura. Si aún no se suelta, es posible que debas introducir un cuchillo por los bordes.
Consejo de violeta-africana.com: ¿ Hace frío en casa? Puede parecer una tontería, pero la temperatura ambiente juega un papel importante en el crecimiento de nuevas raíces. Para obtener los mejores resultados, no trasplantes en una habitación que esté a más de 20 grados centígrados.
2. Cortar la bola de la raíz
Una vez que hayas sacado la violeta africana de su maceta, corta el cepellón en relación con el tamaño del cuello. Por ejemplo, si el cuello mide un centímetro de largo, debes cortar medio centímetro del cepellón. Nota: esta tarea se vuelve más difícil cuanto más tiempo haya pasado sin trasplantar. Simplemente porque, cuanto más largo es el cuello, más trozo del cepellón necesitas cortar.
Si tu violeta africana se ha enraizado, hay más trabajo por hacer. Para las violetas africanas enraizadas, debes cortar el cepellón y preparar una maceta nueva; de lo contrario, la planta se enfermará y morirá (las plantas con raíces han tomado la forma de la maceta y de hecho están estrangulando el suelo, por lo que no puede obtener el agua y los nutrientes que necesita).
3. Retira las hojas dañadas, muertas o moribundas
Con tu violeta africana libre de su maceta, tómate un tiempo y quita las hojas dañadas o viejas. En términos generales, estas son hojas de peldaños más bajos, pero incluso un jardinero novato puede saberlo mirándolas.
También tienes que eliminar las flores. ¿Por qué? En pocas palabras, porque quieres que tu planta se concentre en generar nuevas raíces, nuevas hojas, nuevo crecimiento, en lugar de concentrarse en asignar algunos de sus nutrientes y energía para mantener sus flores en flor.
4. Vuelve a plantar tu violeta africana
En este punto, la planta ya no debería tener la parte inferior del cepellón. De esta manera, la planta se puede empujar hacia dentro de la maceta para que la fila más baja de hojas se alinee con el borde de la maceta; aclaración: el cuello no debe ser visible.
Consejo de violeta-africana.com : coloca pequeños trozos de fragmentos de cerámica (el plástico también funciona) sobre el orificio de drenaje. Llena la maceta hasta la mitad con tierra para macetas específica para violeta africana; la mezcla de tierra debe ser liviana y húmeda, que contenga perlita y turba que ayudan al proceso de aireación.
5. Riega ligeramente tu violeta africana recién transplantada
Regar ligeramente la planta después es un paso importante para garantizar que la planta desarrolle unas de raíces adecuadas cuando se enraíce al suelo. Sin embargo, necesitarás algo menos de de agua que en el paso anterior.
6. ¡Revisa tu trabajo!
Como dijimos anteriormente, si el trasplante se realiza correctamente, el cuello ya no debería ser visible y las hojas inferiores de la planta deberían nivelarse con el borde de la maceta. Además, tu violeta africana estará libre de hojas dañadas o muertas y no tendrá flores.
Consejos para cuidar las violetas africanas trasplantadas
La causa más común de plantas no saludables en jardineros sin experiencia es el tamaño inadecuado de la maceta y no trasplantar la planta con la frecuencia suficiente.
A continuación, repasamos algunos consejos generales para ayudar a que sus violetas africanas se mantengan saludables antes y después del trasplante.
Tamaño de la maceta: ¿Puedes usar tu vieja maceta?
La mayoría de las variedades de violeta africana de tamaño estándar se pueden cultivar en macetas de 4 ”sin ningún problema. Trasplantar no significa cada vez que le da a la planta un lote fresco de tierra; se mueve a una olla más grande. Utiliza siempre una maceta que sea tan grande como las raíces de la planta.
Añadir más tierra solo beneficiará a la planta hasta el punto en que pueda desarrollar unas raíces lo suficientemente grandes como para aprovechar al máximo el suelo. De lo contrario, corren el riesgo de asfixia. Para semi-minis y minis, se debe usar una maceta de no más de 6 centímetros.
Consejo de violeta-africana.com : no te preocupes demasiado por una maceta de plástico o una maceta de cerámica. La mejor maceta para una violeta africana es aquella que se adapta a tus necesidades y estilo de jardinería.
El Mejor Sustrato para violetas africanas
¿Necesitas un sustrato especial para la violeta africana?
Las violetas africanas requieren un sustrato para macetas ligera, porosa y sin tierra. La mayoría de la gente debería comprar el sustrato mirando su aspecto, no su etiqueta. En todo caso, los sustratos especiales ‘para violetas africanas’ tienden a ser sustratos de baja calidad.
Los sustratos con perlita o vermiculita son los mejores. Elige un sustrato esponjoso y consistencia ligera, evitando mezclas con tierra más pesada. Con la suficiente experiencia, puedes cultivar la planta en casi cualquier tipo de suelo. Los suelos más ligeros son más permisivos con despistes como el trasplante infrecuente o el riego insuficiente.
Agua: ¿Es el agua a temperatura ambiente la mejor?
Regar violetas africanas es un poco problemático. En general se debe usar agua tibia que se haya dejado reposar durante aproximadamente 48 horas y siempre regar la planta en la base del tallo. Incluso una gota en las hojas puede causar manchas y dañar la planta.
Ten cuidado de no regar demasiado la planta. Mira si la tierra está húmeda, si no lo está, hay que regarla. Sin embargo, ten cuidado de no dejar que se seque por completo.
Los jardineros expertos están familiarizados con el riego en mecha que aunque es apropiado para la violeta africana, es complicado para novatos.
Fertilizante: ¿Responden bien las violetas africanas a los fertilizantes?
Las violetas africanas se desarrollan mejor con fertilizantes con mayor contenido de fósforo; el número medio en la proporción de fertilizantes debería ser más alto que el resto, es decir. NPK – 15-45-15. Al mezclar el fertilizante, debe tener un cuarto de fuerza en cada floración posterior.
Los indicadores de que la planta no está recibiendo suficiente fertilizante incluyen colores de hojas pálidos, el amarilleo y el marchitamiento de las hojas inferiores de las plantas, las raíces de color marrón oscuro o podridas y una costra de fertilizante en la superficie de la tierra nos indican también que la planta está siendo fertilizada en exceso.
